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Ya lo sé: ahora mismo no te hace gracia este aviso. Pero Internet es un lugar ruidoso que invita a la distracción, y a mí me encantaría que me leyeses con calma. Por eso, ¿qué te parece si quedamos? Una vez al mes, por ejemplo. Te enviaré un resumen de las columnas publicadas. Prometo no hacer mucho ruido... ¿Qué dices?